1- Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un cubo para echar su basura, procura que no sea en tu mente.   2- Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle. 3- Cumple tus promesas. Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a re-negociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio.   4- Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas. 5- Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad. 6- Tira, recoge ...

Me concentro fácilmente en mis estudios. Mi rendimiento académico aumenta con firmeza. La integración de los conceptos que estudios se me facilita cada día más. Mi retención aumenta a la vez que mi habilidad para leer se afianza. Comprendo sin esfuerzo las palabras que mi profesor me transmite. . Me siento completamente unid@ en un plano espiritual a mis compañeros y a mi profesor. Cuando presento un examen me siento tranquilo y en completo dominio de mis capacidades intelectuales. Integro fácilmente los conceptos que aprendo en clase y en los libros. Mi mente y mi cuerpo trabajan al unísono en estrecha colaboración para mis fines académicos. Mi mente absorbe, retiene y comprende con absoluta facilidad toda la información que voy recibiendo. Mi profesor tiene la misión espiritual de ayudarme en el camino de mi aprendizaje y doy gracias por ellos. Agradezco al universo por poner en mi camino todos los recursos mentales y físicos que se requieren para mi excelente r...